Hay que preguntarle. Preguntadle qué se siente ser tiempo de sobra, restos solitarios de horas malgastadas. Vacío de valses arrítmicos y bocanadas de aire hermético. Hay que compadecer ante él, acaso huérfano o vástago bastardo de Cronos. Adefesio astrológico, excusa prolongada, servidumbre de la acronicidad. Todo suceder en él resulta apoplejía; ved su sangre pulula recuerdos. Todo fue pero nada debería ser; no figura entre los días, es un injerto inerte y valetudinario.
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