2009-12-12

Pieles

Sorteando mis memorias
dediqué horas a exprimir detalles
inventar sucesos, cambiar su orden,
bautizar a mis bastardos con tinta.

Regresando sobre mis pasos
dediqué días a contar improntas,
a ponerles nombres, banderas y colores,
y así proclamar como patria al camino.

Revisando en su totalidad mi cuerpo
dediqué años a excrutar mis cicatrices,
a crear unas nuevas, a reabrir las viejas,
para algún día poderme apodar Tiempo.

¡Mírame bien para no volver a voltear!
Pues un prisionero de su propio cuerpo
tiene uno derecho de poderlo ningunear.

No hay comentarios: